La Motivación
domingo, 16 de agosto de 2015
viernes, 14 de agosto de 2015
10
rasgos básicos de un gerente
Un gerente es la persona
responsable de planear y dirigir el trabajo de un grupo de individuos, de
monitorear su desempeño y tomar acción correctiva cuando es necesario.
Los rasgos de personalidad
más importantes a ser considerados cuando se contrata a un gerente son los
siguientes:
1. Actitud optimista: Las
organizaciones desean un gerente que va a enfrentar cada proyecto y cada día de
trabajo con una actitud optimista. Un gerente que llegará sonriente y que
expresará buenos sentimientos acerca del trabajo que está realizando junto con
su equipo. Esto ayudará a mantener la moral elevada en la empresa lo cual lleva
a tener empleados satisfechos, bajas tasas de rotación de personal, mayores
índices de productividad y crecimiento del negocio.
2. Confiabilidad: Cuando
se trata de realizar las cosas, las empresas querrán tener un gerente con el
que pueda contar. Un gerente confiable es alguien que siempre se presenta a
trabajar a tiempo, no afloja en el trabajo y puede contarse con él para
permanecer a altas horas si las necesidades de la oficina lo requieren. Una
persona a la que si la empresa requiere pedirle algo simplemente haya que pedírselo,
teniendo la seguridad de que cumplirá con su cometido.
3. Habilidades de
resolución de problemas: Al desempeñarse como un intermediario entre la empresa
y la gente, el gerente será el eslabón entre los empleados de niveles de base y
los de nivel superior, también servirá como mediador de disputas entre
empleados de los niveles inferiores.
Con objeto de desempeñar
bien este papel, el gerente que se contrate tendrá que ser capaz de manejar
conflictos en el lugar de trabajo. Tendrá que tener la capacidad de detectar
los problemas cuando se están formando y ahí de detenerlos así como poder
negociar para resolver conflictos más grandes que sí llegan a presentarse.
4. Integridad y confiabilidad:
Al momento de contratar un gerente las empresas preferirán una persona con un perfil
de integridad y honestidad, en la que puedan confiar. Claro que es difícil
identificar esto en una entrevista pero haciendo las preguntas correctas, el entrevistador
puede tener una percepción de la integridad básica de la persona. Al contratar
a alguien confiable, la empresa reducirá el estrés de poner al mando del
negocio a la persona equivocada.
5. Excelentes habilidades
de servicio a clientes: No importa el tipo de negocio en que esté, contar con un
gerente que sea excelente tratando con clientes será de mucha ayuda.
En realidad esta faceta
puede que no ocupe un porcentaje muy alto de las tareas diarias de un gerente,
ya que esas obligaciones recaen en otros empleados, sin embargo, cuando se
presenten problemas con clientes, es el gerente el que tiene el potencial de
resolver la situación o de agravarla. Se necesita contratar un gerente que sea
capaz de satisfacer hasta los clientes más exigentes de manera que se les pueda
retener y el negocio pueda seguir creciendo.
6. Motivación personal: la
persona que usted contrate para el puesto tendrá que ser capaz de desempeñar el
trabajo sin la necesidad de que se le vigile constantemente. Este individuo necesita
ser capaz de entender los objetivos básicos del negocio y estructurar sus
propias estrategias para alcanzar dichos objetivos.
Debe ser una persona capaz
de aportar todo lo que tiene en cada día de su labor, sin tener la estrecha
supervisión de un jefe.
7. Trabajar en equipo: el
gerente deberá ser alguien que se comprometa a trabajar en equipo con el fin de
mejorar el negocio. Esto quiere decir que el gerente no solamente está en el negocio
con la finalidad egoísta de progresar. Más bien, estará interesado en hacer
crecer el negocio por que será en su beneficio y en el de las demás personas
que colaboran en la empresa. Un gerente es un intermediario que tiene que
trabajar tanto con directivos en un nivel superior como con trabajadores en los
niveles más modestos, entonces es muy importante que esta persona sea un
verdadero trabajador en equipo.
8. Conocimientos de la
industria: El gerente deberá ser alguien capaz de responder a las peguntas que
le hagan los clientes y miembros del staff. Esto significa que deberá tener un
conocimiento preciso de lo que está hablando. Aunque se puede dar entrenamiento
de una industria específica a alguien que es un buen gerente, la persona ideal
para el puesto será alguien que ya cuenta con conocimientos avanzados o
experiencia específica en esa industria.
9. Habilidad para mantener
la calma. El rol de ser gerente puede ser una pesada responsabilidad. Mucho
estrés rodea diariamente las tareas propias de la administración. Numerosos
problemas se presentan a lo largo de una jornada de trabajo y el gerente es
responsable de atenderlos de manera adecuada. Las organizaciones preferirán contratar
a alguien que sea capaz de mantenerse calmado la mayoría de las veces. Un
gerente tranquilo mantendrá el ambiente de la oficina tranquilo lo cual llevará
a un incremento en la productividad y un mejor ambiente de trabajo. Esto
definitivamente hará crecer su negocio.
10. Habilidades de
liderazgo. Mas allá de todas las cualidades que las empresas quieren identificar
en un gerente, tienen que ser evidentes sus habilidades de liderazgo. El
candidato idóneo tiene que confiar en sus propias habilidades para dirigir al
equipo de trabajo. Necesita tener facilidad para hablar en público, poder
delegar tareas de una manera apropiada y ser alguien de quien los trabajadores
se sientan cómodos al recibir órdenes. Si las empresas ven todas estas
características en alguien durante una entrevista, saben que es una apuesta
segura el suponer que esa persona será un buen gerente para su negocio.
Los gerentes pueden
dirigir trabajadores directamente o tener varios supervisores que trabajen
directamente con los empleados. El gerente deberá estar familiarizado con el trabajo
de todos los grupos que supervise, pero no necesariamente debe ser el mejor en todas
esas áreas. Es más importante para un gerente saber cómo dirigir a sus
trabajadores que saber cómo hacer bien la función correspondiente a cada uno de
ellos.
Importancia
del gerente en la motivación.
Hay
diversas cosas que un gerente puede realizar para fomentar la motivación de los
trabajadores:
- · Hacer interesante el trabajo
El
Gerente debe hacer un análisis minucioso de cuanto cargo tenga bajo su control.
El gerente no debe olvidarse de una pregunta, la cual debe hacerlo
constantemente: “¿Es posible enriquecer este cargo para hacerlo más
interesante?”. Hay un límite al desempeño satisfactorio que puede esperarse de
personas ocupadas en tareas muy rutinarias. Es muy común que nos encontremos
frente a personas que al ejecutar constantemente la misma simple operación sin
cesar, traiga rápidamente apatía y el aburrimiento de estas.
- · Relacionar las recompensas con el rendimiento
Hay
muchas razones por las cuales los gerentes tienden a ser recios para vincular
las recompensas con el rendimiento. Primero y principal, es mucho más fácil
acordar a todos un mismo aumento de sueldo. Este enfoque suele implicar menos
trajín y además requiere poca justificación. La segunda razón podría estar
ligada a los convenios sindicales, los cuales suelen estipular, que a igual
trabajo debe pagarse a igual salario. Suele ocurrir en otros casos que la
política de la organización determina que los aumentos de salarios responden a
ciertos lineamientos, no vinculables con el rendimiento.
Sin
embargo, aún en estos casos, suele haber recompensas aparte del sueldo que
pueden ser vinculadas con el rendimiento. Estos podrían incluir la asignación a
tareas preferidas o algún tipo de reconocimiento formal.
- · Proporcionar recompensas que sean valoradas
Muy
pocos gerentes se detienen alguna vez a pensar que tipo de retribuciones son
más apreciadas por el personal. Habitualmente los administradores piensan que
el pago es la única recompensa con la cual disponen y creen además, que no
tienen nada para decir con respecto a las recompensas que se ofrecen. Es
creencia general que solo la administración superior puede tomar estas
decisiones. Sin embargo, hay muchos otros tipos de recompensas que podrían ser
realmente apreciadas por el personal. Vale destacar a modo de ejemplo; al
empleado a quien se le asigna para trabajar en determinado proyecto o se le
confía una nueva máquina o herramienta; seguramente esté valoraría mucho este
tipo de recompensa. Como síntesis podría decirse que lo más importante para el administrador
es que sepa contemplar las recompensas con las que dispone y saber además que
cosas valora el subordinado.
- · Tratar a los empleados como personas
Es
de suma importancia que los trabajadores sean tratados del mismo modo, ya que
en el mundo de hoy tan impersonal, hay una creciente tendencia a tratar a los
empleados como si fueras cifras en las computadoras. Este es un concepto
erróneo puesto que en lo personal creemos que a casi todas las personas les
gusta ser tratadas como individuos.
- · Alentar la participación y la colaboración
Los
beneficios motivacionales derivados de la sincera participación del empleado
son sin duda muy altas. Pero pese a todos los beneficios potenciales, creemos
que sigue habiendo supervisores que hacen poco para alentar la participación de
los trabajadores.
- · Ofrecer retroalimentación (Feed-back) precisa y oportuna
A
nadie le gusta permanecer a oscuras con respeto a su propio desempeño. De hecho
un juicio de rendimiento negativo puede ser preferible a ninguno. En esta
situación, una persona sabrá lo que debe hacer para mejorar. La falta de
retroalimentación suele producir en el empleado una frustración que a menudo
tiene un efecto negativo en su rendimiento.
Capital Humano
Siendo el Capital Humano de una organización el activo más importante de la misma, conocer los motivos que le generan satisfacción es fundamental para mantenerlos comprometidos en pro del buen funcionamiento de la empresa y del negocio de ella, entendiendo la motivación como las razones que le permiten al individuo desarrollar sus tareas laborales de manera correcta y con un grado de compromiso acorde. Mantener dicho compromiso intacto es importante también para retener al capital humano dentro de la empresa estimulando e impulsando su desarrollo siendo que, a mayor satisfacción laboral, menor es la rotación de personal dentro de una empresa y el ausentismo de ésta.
Diversas son las variables que ejercen fuerza en los trabajadores:
- REMUNERACION: el estudio de las políticas salariales constituye una tarea fundamental para la Gestión del Capital Humano de acuerdo a las responsabilidades asignadas y al desempeño alcanzado por el mismo, así como su distribución correcta para optimizar dichos desempeños, siendo que la remuneración ofrecida por la labor realizada, es sin duda uno de los factores principales que condicionan la motivación del trabajador. Estimular al trabajador brindándole remuneraciones acordes es uno de las razones de mayor motivación para el mismo.
- CLIMA ORGANIZACIONAL: desarrollar sus tareas en un ambiente laboral cordial constituye otro de los elementos motivacionales para los empleados, siendo que el análisis del Clima Organizacional le permitirá al empleador planificar y alinear el desempeño de sus trabajadores con los objetivos de su empresa, dado que dicho clima influye directamente en el grado de satisfacción de sus empleados.
- ROL DEL JEFE: trasmitirle a sus empleados su interés por ellos, indicándoles que son valiosos para su empresa, constituye un impulso importante para mantener el compromiso inicialmente mencionado, incentivando y reconociendo las tareas desarrolladas; siendo que la búsqueda de reconocimiento y de prestigio social, son una de las fuerzas motivacionales intrínsecas en los trabajadores.
Dentro del ámbito laboral también ejercen fuerza e inciden en el grado de satisfacción del Capital Humano, otros tipos de variables, siendo alguna de ellas:
- grupo de trabajo,
- tipo de liderazgo,
- nivel profesional de los trabajadores y sus compañeros,
- competencias personales y
- tareas del cargo.
Variables de carácter personal también pueden constituir fuentes de desmotivación como los son la edad, el género y el nivel de educación de los trabajadores, así como la falta de igualdad en el ámbito laboral.
La pérdida o ausencia de motivación pueden generar en el trabajador, tanto a nivel personal como profesional; angustia, insatisfacción, pérdida de entusiasmo y de disposición, lo que en ocasiones puede acarrear disminución en su productividad, desorganización en la empresa yendo en detrimento de los objetivos estratégicos de ésta. Fomentar el progreso de sus trabajadores, estimular el desarrollo de sus competencias, potenciar sus habilidades así como brindarles la posibilidad de crecer junto con la empresa, es una de las metas que debe alcanzar la dirigencia de ésta, dado que el rendimiento de su Capital Humano reditúa en el éxito de su negocio por lo que invertir en acciones destinadas al perfeccionamiento del mismo, le permitirá a la empresa cumplir con sus objetivos.
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